Al menos 300 personas han protestado este domingo en Brasil ante la visita del presidente estadounidense, Barack Obama, por su política imperialista y contra la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas de intervenir militarmente al territorio libio.
La corresponsal de teleSUR en Brasil, Lucrecia Franco informó este domingo que “las protestas son grandes, 300 personas marchan en rechazo a las políticas de Estados Unidos”.
Los ciudadanos del país suramericano también reclaman que fue en suelo brasileño donde el mandatario estadounidense decidió atacar militarmente a Libia, señaló Franco.
Reportó que el Movimiento Sin Tierra y la Central Única de Trabajadores de Brasil (CTB) han manifestado que Obama se encuentra en Brasil para “robar los recursos” de esa nación.
El presidente de EEUU, Barack Obama, afirmó este sábado, durante la presentación a la prensa conjunta con su homóloga brasilera, que apoya "con entusiasmo" el crecimiento económico de Brasil y expresó la voluntad de su país de convertirse en "un gran cliente" de sus fuentes de energía.
Franco indicó que para esta tarde, el jefe de Estado de EE.UU. dará un discurso en su segundo día de visita en un teatro cerca de la Cinelandia, ubicada en el centro de Río de Janeiro (sureste) y posteriormente visitará al Cristo Redentor ubicado en esa misma ciudad.
“Hay muchísima policía, mucha seguridad tanto brasileña como norteamericana”, dijo la corresponsal.
En la mañana de este lunes partirá a Chile como parte de su agenda oficial.
Reunidos en una plenaria el miércoles pasado, casi 200 representantes de movimientos sociales y los sindicatos emitieron una convocatoria en la que declaran a Obama persona no grata en Brasil.
"No aceptamos el mantenimiento del bloqueo contra Cuba, las provocaciones contra Venezuela, Nicaragua, Bolivia o Ecuador", señala el texto.
El periodista y analista político brasileño Beto Almeida señaló que Barack Obama “viene a Brasil a buscar y recuperar protagonismo y hegemonía frente a Brasil y frente a la economía brasileña, porque Brasil ha diversificado su política de relación internacional”.
En su visita por Brasil, el presidente estadounidense consideró que para que su país “salga ganando, creo que EE.UU, y Brasil pueden y deben tener una relación económica, una relación de cooperación en sectores claves de las dos economías, como la energía, que irá en beneficio de ambos”.
Obama abogó por fortalecer las relaciones bilaterales con Brasil en “el nuevo contexto internacional” y especialmente en el ámbito de cooperación energética.
“La integración económica puede llevar a la multiplicación de oportunidades (...) El espíritu del capitalismo puede triunfar unido al espíritu de justicia social. La democracia es el camino más corto para el progreso económico”, aseguró.
