Desde Estados Unidos se continúan fraguando maniobras acciones terroristas contra Cuba, con posible apoyo de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y la anticastrista Fundación Nacional Cubanoamericana (FNCA), además del criminal Luis Posada Carriles, según denuncia un artículo publicado por el diario Granma en su sitio web.
El referido artículo refiere las declaraciones que realizó el terrorista Francisco Chávez Abarca luego de su captura en Venezuela en julio pasado, quien detalló que se habían diseñado planes para atentar contra Venezuela, evidenciando además que las acciones terroristas contra la isla continúan.
Casi de manera simultánea a la captura de Chávez Abarca en Caracas, la capital venezolana el 1 de julio pasado, se conoció que Posada Carriles, prófugo de la Justicia venezolana, junto a "varias organizaciones extremistas radicadas en Estados Unidos se proponen continuar los planes de acciones violentas y paramilitares contra Cuba".
Al asisitir como invitado de honor al congreso anual de la organización terrorista Alpha 66 entre los días 27 y 28 de febrero pasado en Miami (EE.UU.), Posada Carriles propuso retomar los planes de acciones violentas contra la isla antillana.
De esa reunión, los jefes de la agrupación contrarrevolucionaria decidieron aparentar estar transformándose en partido político civil y pacífico, al tiempo que ratificaron al terrorismo como su principal línea de acción contra Cuba.
En ese orden propusieron recaudar fondos para adquirir nuevas embarcaciones y artillarlas con ametralladoras para desembarcar en Cuba o atacar sus costas. A poco menos de un mes de ese congreso de Alpha 66, fue atacada la residencia del embajador de Cuba en Guatemala con proyectiles explosivos disparados por un lanzagranadas que causó daños materiales.
Según plantea Granma, varios analistas han revelado la preocupación y expectativas creadas en Estados Unidos a raíz de la captura de Chávez Abarca en Venezuela, entre congresistas y funcionarios que han hecho carrera política a la sombra de amigos muy ligados a Posada Carriles, la CIA y la FNCA.
Luego de ser detenido por las autoridades venezolanas, Chávez Abarca confesó que intentó ingresar fraudulentamente a ese país suramericano para ejecutar planes desestabilizadores con el propósito de atentar contra dirigentes del Gobierno bolivariano y afectar su imagen en el proceso electoral que se celebrará este domingo 26 de septiembre.
Declaró que llevaba el propósito de "quemar llantas, hacer disturbios en la calle, atacar un partido político para que le caiga a otro" la responsabilidad.
Reveló que entre los planes actuales de Posada Carriles sobresale la intención de hundir barcos cargados de petróleo que viajan de Venezuela a Cuba, al tiempo que aseguró que la FNCA destina casi 100 millones de dólares en planes antivenezolanos, al considerar a ese país como "columna financiera" de Cuba, Ecuador, Bolivia y Guatemala.
Según sus declaraciones, a finales de septiembre de 2005 se planificó asesinar al presidente venezolano, Hugo Chávez, para lo cual Posada Carriles orientó utilizar un fusil tipo Barret calibre 50.
Desde que este mercenario salió de prisión, en septiembre de 2007, tras cumplir una sanción por tráfico de autos robados, en coordinación con Posada Carilles se propuso realizar acciones violentas contra Cuba y otros países de la Alianza Bolivariana para los pueblos de nuestra América (ALBA), incluyendo atentados al presidente Chávez como forma de obtener beneficios monetarios.
Chávez Abarca fue parte de los mercenarios reclutados en Centroamérica para atentar contra Cuba por parte de Posada Carriles, responsable confeso, entre otros actos terroristas, de la voladura de un avión de Cubana de Aviación con 73 personas a bordo en 1976.
