La
República Islámica de Irán deplora la demora de la Organización de las
Naciones Unidas (ONU) a la hora de enviar un equipo técnico para
investigar el presunto uso de armas químicas en Siria.
Así lo declaró el miércoles el viceministro de Exteriores de Irán para Asuntos Jurídicos e Internacionales, Mohamad Mahdi Ajundzadeh, en un encuentro mantenido con el director general de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), Ahmed Uzumcu, al margen de la tercera conferencia de la Revisión de la Convención de Prohibición de Armas Químicas celebrada en La Haya.
El diplomático persa instó al organismo internacional a abrir lo más pronto posible una investigación para que se identifiquen y castiguen tanto a los responsables de este crimen inhumano que contraviene todas las normas jurídicas e internacionales, como a países que ampararon (en esa vía) a los asesinos.
Durante la cita, Ajundzadeh denunció, además, la falta de cooperación del régimen de Israel para celebrar en el año pasado una conferencia sobre un Oriente Medio libre de armas de destrucción masiva.
Lanzó duras críticas por la falta de compromiso de las grandes potencias, poseedoras de armas químicas, EE.UU. incluido, para destruir sus armamentos dentro del plazo preestablecido que vencía el 29 de abril de 2012, y aseguró que tal actuación constituye un potencial peligro para la paz y seguridad internacional.
Por su parte, el director general de la OPAQ destacó la participación activa y la estrecha cooperación de Teherán con el organismo mundial y recalcó que el foro aplicaría todas sus capacidades y recursos para avanzar la investigación en Siria.
El pasado 19 de marzo, terroristas dispararon un misil cargado con productos químicos contra la región de Jan al-Asal, en Alepo. Al menos 25 personas perdieron la vida y más de 86 resultaron heridas por la explosión.
El Gobierno de Siria pidió a la ONU el envío inmediato de una misión independiente para investigar el presunto ataque con armas químicas en la provincia de Alepo.
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