El comandante en Jefe del Ejército de Nicaragua, Julio César Avilés, denunció este sábado una conspiración internacional de varios países contra su nación con el supuesto fin proteger los intereses expansionistas de Costa Rica.
“Aquí hay que estar claro nicaragua ha perdido territorio tanto al norte como al sur de nuestro país no y aquí no es casual en la Corte Penal Internacional cuando Nicaragua está, a través del embajador nuestro, del doctor Carlos Argueiro, viendo el juicio con Colombia aparecen otros países en este caso Honduras y Costa Rica involucrándose, tratándose de tensionar la posición de defensa nicaragüense en ese fuego internacional”, destacó el alto funcionario castrense.
Avilés ofreció las declaraciones luego de la ceremonia militar conmemoración del día del Soldado de la Patria en Managua en las que negó una vez más la supuesta invasión militar a Costa Rica y criticó las denuncias de Honduras sobre la presunta existencia de campamentos de entrenamientos de guerrilleros de ese país en territorio nicaragüense.
El jefe militar denunció la falsedad la campaña emprendida en la que se ha llegado a afirmar que Nicaragua está enviando armas para causar desestabilización en el vecino país del norte, acusación negada en reiteredas oportunidades por el gobierno nicaragüense.
Señaló que la propia información de medios hondureños desmiente las versiones provenientes del gobierno de Lobo, puesto que lo que reflejan que en el sector Bajo Aguán, es que existe un conflicto de tierras entre campesinos y empresarios privados, que han degenerado en muertes con armas de fuego.
Sobre Costa Rica dijo que el Ejército de Nicaragüa se sostiene en territorio nacional, en la misión de apoyar la limpieza del río San Juan y bajo las leyes nicaragüenses y en respeto al medio ambiente.
Denunció que San José está lanzando sus calumnias y mentiras contra Nicaragua para tratar de arrebatar territorio a través de maniobras y manipulaciones ilegales.
El jefe militar señaló que todas estas repentinas acusaciones contra Nicaragua forman parte de una estrategia combinada y armada para golpear la imagen internacional del Gobierno de Managua con el objetivo claro de cercenar el territorio nicaragüense.
Estimó que la ola de acusaciones contra su país tiene el propósito de incidir en los litigios internacionales que Nicaragua libra en La Haya por la legitimización del río San Juan.
